Hora de Celebrar - SEAUMN
Hora de Celebrar - SEAUMN
Objetivos Específicos:
1. Generar un ambiente propicio para reflexionar sobre la bendición de
contar con una Institución Educativa Adventista en su comunidad.
2. Motivar a los Padres de Familia y Alumnos a manifestar un espíritu de
gratitud por: (A) tener acceso a la educación adventista y (B) por las ben
diciones recibidas del Señor en lo que ha avanzado el ciclo escolar.
3. Propiciar espacios de oración intercesora por alumnos adventistas que
actualmente estudian en escuelas NO ASD.
[Link] a los Padres de Familia a inscribir a sus hijos en la escuela ad
ventista.
Este año 2022, el Día de la Educación Adventista habrá de celebrarse de acuerdo a la agen-
da establecida en cada campo local. Algunas asociaciones y misiones lo realizarán el pri-
mer fin de semana del mes de febrero (4 y 5 de febrero), y otras lo agendaron para los días
18 y 19 de febrero. Es importante compartir el material de culto divino de manera oportuna
a todas las iglesias del territorio, incluyendo localidades donde no haya una escuela adven-
tista.
En las localidades donde si cuenten con una escuela adventista se han provisto los materia-
les para que el personal de la escuela presente un programa especial el día viernes, ade-
más de los programas de escuela sabática y culto divino del sábado por la mañana.
El Sistema Educativo de la Unión Mexicana del Norte, coloca a su disposición los siguientes
recursos para la conmemoración del Día de la Educación Adventista como un valioso recur-
so base. Cada institución educativa local cuenta con la autorización de adaptar y enriquecer
la propuesta base generada con el objetivo de presentar a cada familia de la iglesia el plan
de Dios respecto a la educación de sus hijos.
Deseamos que los materiales preparados sean de gran bendición para las familias de la
iglesia.
Viernes 05 /18 de febrero de 2022,
Tiempo de educar.
El Servicio de Recepción Sábado estará enfocado en la hermosa responsabilidad que
el Señor ha colocado en los Padres de Familia como primeros maestros de sus hijos.
«La obra de todos los padres consiste en educar a sus hijos en los caminos del Señor. Esta no
es una cuestión que pueda tratarse livianamente, o dejarse de lado, sin incurrir en el desagra-
do de Dios. No se nos ha llamado a decidir cuál es la conducta que deben seguir otros, o cómo
podemos hacer las cosas más fácilmente, sino que debemos preguntarnos: ¿qué dice el Señor?
Ni los padres ni los hijos pueden tener paz o felicidad o reposo de espíritu cuando transitan por
una senda falsa. Pero cuando el temor de Dios reine en el corazón combinado con el amor a
Jesús se experimentarán paz y gozo».
(Conducción del niño, Pág. 63.)
HERENCIA DE JEHOVÁ
Ptr. David Hernández Vanegas
Capellán del Colegio Alfa y Omega
Texto “Son los hijos herencia que da el Señor, son los descendien-
clave tes una recompensa”.
Dado que los hijos primero son de Dios, él ha encargado a los padres la
Mensaje/ responsabilidad de educarlos en el sentido pleno de la palabra, conec-
Resumen tarlos con su Creador para redimirlos. En apoyo a esta labor, la escuela
y la iglesia ejercen un soporte para la familia, pero jamás sustituyen su
responsabilidad.
Saber que los hijos son una herencia de Dios otorgados a los
padres para ayudarlos a crecer como verdaderos hijos de él.
Objetivos Sentir gratitud a Dios por la paternidad y los medios otorgados en
apoyo de esta responsabilidad.
Texto clave:
“Son los hijos herencia que da el Señor, son los descendientes una recompensa”.
(Sal. 127: 3 BLP)
Mensaje/Resumen Dado que los hijos primero son de Dios, él ha encargado a los padres
la responsabilidad de educarlos en el sentido pleno de la palabra, conectarlos con su
Creador para redimirlos. En apoyo a esta labor, la escuela y la iglesia ejercen un soporte
para la familia, pero jamás sustituyen su responsabilidad.
Objetivos Saber que los hijos son una herencia de Dios otorgados a los padres para
ayudarlos a crecer como verdaderos hijos de él.
Sentir gratitud a Dios por la paternidad y los medios otorgados en apoyo de esta res-
ponsabilidad.
Hacer el compromiso de ayudar a los hijos a tener una relación salvadora con
Jesús y alcanzar el desarrollo máximo de su ser.
Recursos • Una figura grande de Jesús.
• Una cruz.
• Un “bebé” de juguete, en su cuna.
• Una maleta “pañalera”.
• Una semilla de mango.
• Una maceta con tierra.
• Una regadera para plantas.
• Una Biblia de gran tamaño.
• Carteles con las especificaciones que se dan en el desarrollo del sermón.
Introducción
Muestre a los asistentes la semilla y pregunte…
Por favor, observen esta semilla. ¡Es increíble que dentro de ella haya encerrada
vida! ¡Sí, así como lo oyen! Esta semilla tiene un enorme potencial para convertirse en
un gran árbol. “Potencial” significa que aún no lo es, no se manifiesta, no existe, pero
tiene la posibilidad de ser, manifestarse o existir en un futuro. ¿De qué depende que
esta semilla pase de la “potencia” a la “existencia”?
Hay muchos factores para que esta semilla germine, crezca y florezca como un enor-
me árbol donde las aves harán su nido, sus frutos servirán para alimentar a muchos
seres vivos, sus raíces ayudarán a prevenir inundaciones, sus hojas reducirán el dióxido
de carbono en el ambiente y a cambio producirán oxigeno para todos…
Deposite la semilla en la maceta y riéguela…
¿Qué hace falta para que esta semilla despliegue todo su potencial y llegue a ser una
bendición en el ecosistema?
Hoy no hablaremos de semillas y árboles, pero esta analogía nos sirve para dimen-
sionar desde otra perspectiva la enorme responsabilidad de la educación de un hijo.
Cuando hablamos de “educación” en este sermón nos referimos no a “un curso de-
terminado de estudios”, ni tomamos el término como sinónimo de crianza, hablamos
de “la verdadera educación”. Básicamente nos proponemos hacer un recorrido por la fi-
losofía adventista de la educación, basándonos en la Biblia, y orientándola a la familia.
Para ello, lo ejemplificaremos con el siguiente caso:
“Martín” de una manera análoga a la semilla nació con enorme potencial. Desde
el momento de la fecundación, al unirse los dos gametos -espermatozoide y óvulo-, ya
se escribió el código genético que le dará las características para llegar a ser un ser
humano con capacidades increíbles. Pero exclusivamente el código genético no basta,
hay una serie de factores que deben ocurrir para que “Martín” alcance su potencial y
su propósito en la vida.
Veamos de qué manera la Biblia orienta a los padres de “Martín” para ayudarle a al-
canzar el propósito de su vida.
Desarrollo
[Link] naturaleza de Martín y el propósito de Dios al crearlo:
Para que los padres de “Martín” puedan cumplir con su responsabilidad, deben recono-
cer tres verdades bíblicas que tienen una profunda implicación práctica en el día a día.
Es decir, no son conceptos abstractos, son la razón por la que somos lo que somos
como humanos.
A.“Creado a imagen de Dios”
1. Génesis 1: 26-27. En primer lugar, “Martín”, como todos los niños del mundo,
fue “creado por Dios a su imagen y semejanza”, esto significa al menos tres cosas im-
portantes para su educación:
a) Antes que, a sus padres, “Martín” pertenece a Dios por creación
y redención. Él es su verdadero Padre. Y esta es una de las lecciones más importan-
tes que ellos deben enseñarle. La Biblia dice “Yo hice la tierra y creé al hombre sobre
ella…” (Is. 45: 12). “Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro estaban escritas todas
aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas”.
De modo que, los padres deben ayudar a sus hijos a reconocer que pertenecen a Dios.
Deben aprender a amarle “con todo su corazón, y con toda su alma, y con toda tu men-
te, y con todas sus fuerzas” (Mr. 12: 30).
Los antiguos judíos reconocían esta verdad cuando llevaban a sus hijos para presentarlos
al templo, como sucedió con el caso de José y María cuando presentaron al niño Jesús.
(Lc. 2: 22-39).
Hay otras formas en que pueden enseñarse estas lecciones, pero la principal, es a través
de la relación que establecen con ellos, y el modelo que representan.
b)Lo segundo que implica el texto de Génesis 1: 26-28, es que “Martín” tiene
características similares a su Creador: La capacidad de pensar, la individualidad, la ca-
pacidad de hacer, gracias a que fue creado a imagen de Dios (Stg. 3: 9). Elena G. White lo
expresa de esta manera, “todo ser creado a la imagen de Dios, está dotado de una facultad
semejante a la del Creador: Individualidad, la facultad de pensar y hacer” (Ed. 16).
Por lo tanto, no puede ser educado a la ligera, “es necesario que los intereses de los hijos
estén antes que el propio progreso y comodidad; no eligieron venir al mundo, y debe dárse-
les el mejor comienzo posible en la vida”.
La educación que “Martín” reciba en casa y más adelante en la escuela, debe caracterizar-
se por el amor incondicional, la simpatía, el respeto, la búsqueda del desarrollo máximo de
todas sus facultades. Además, reconocer esta verdad importantísima: “Él es un ser huma-
no hecho a la imagen de Dios, de modo que el ‘perfil de egreso’ a alcanzar es un carácter
semejante al de Cristo”.
c)Finalmente, Génesis 1: 26-27 implica para la educación de “Martín” el re-
conocimiento de que Dios debe ser el orientador y director de ella. Si Él es su creador y
además el modelo para seguir, entonces los valores, las actitudes, etc., deben venir de
Dios y su revelación en las Escrituras. ¡Quién mejor sabe lo que conviene a sus hijos que su
propio Padre! Por ello, los padres terrenales de “Martín” deben buscar la sabiduría de Dios
en oración y a través de su palabra. Al final, como hemos leído “…herencia de Jehová son
los hijos…” (Sal. 127: 3).
2. Dios tiene un propósito para “Martín”. Además de reconocer que fue creado a ima-
gen de Dios, y todo lo que ello implica, los padres de “Martín” también deben de saber que
Dios tiene un propósito para el pequeño.
a) Uno de los propósitos de Dios al crear al ser humano fue que ellos aprendieran de
él, reflejarlo al servir al resto de su creación. Disfrutar de la creación, y gozar de feli
cidad plena. La Biblia dice “para gloria mía los he creado, los formé y los hice”
(Is. 43: 7).
A través del servicio, de la administración y crecimiento de todas sus facultades,
el ser humano reflejaría más y más la gloria de su Creador. Manifestaría las
cualidades con las que Dios lo había formado. Reflejaría que, en verdad, había sido
creado a su imagen y semejanza. Dios sigue manteniendo este mismo propó
sito para la familia humana en general, y para “Martín” en particular:
“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y
glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt. 5:16).
b) De manera particular, los padres de “Martín” deben buscar la ayuda de Dios para
que él les indique “cuál es su camino”. La Biblia dice “instruye al niño en su
camino, y aún cuando fuere viejo no se apartará de él” (Pro. 22: 6). Todos
hemos escuchado este texto, pero lo que realmente quiere decir es que
“Martín” tiene “su propio camino”. Literalmente el texto dice “según la boca de
su camino”, “lo que el camino de clara para él”. Dios le ha facultado con habilidades,
características y personalidad única.
Si deseamos que “Martín” sea un adulto que sea de bendición para su comunidad, honre y
glorifique a Dios, entonces sus padres deben “[estudiar] la manera en que su hijo puede ser
de mayor utilidad para sí mismo y para otros, lo cual le proporcionará mayor felicidad. Las
facultades de cada persona determinan el lugar específico que ha de ocupar en la vida (Ed
259, 260). A cada persona Dios le ha designado un lugar en su gran plan (PR 393) y la ha
dotado con las facultades necesarias para ocupar ese lugar especial”.
De modo que la oración constante de los padres debiera ser: “Enséñanos cuál es el camino
que Martín debe seguir; cómo podemos educarle para que alcance el propósito para el cual
le has creado”. Elena G. White dice que:
Sin duda, la mejor respuesta a esta oración puede ser cuando “Martín” exprese, como dijo el
salmista “el Señor cumplirá su propósito en mí…” (Sal. 138: 8).
[Link]ón:
La siguiente verdad bíblica que deben comprender los padres es cómo les afecta el estado
de pecado y por lo tanto la necesidad de transformación, tanto de ellos como de “Martín”.
Cuando leemos Génesis 3: 6 al 13 encontramos dos cosas fundamentales que, aunque pue-
den parecer a algunos como abstractas o teóricas, tienen un enorme peso en el día a día, y
sobre todo en nuestra relación con Dios y los demás.
Elena G. White comenta: “Es mucho más fácil dar la preparación física, el desarrollo del
cuerpo, que impartir la preparación espiritual… En ningún caso debe descuidarse la prepa-
ración espiritual… Algunos colocan la educación después de la religión, pero la verdadera
educación es religión. La Biblia debería ser el primer libro de texto del niño. De este libro,
los padres han de dar sabias instrucciones. La Palabra de Dios ha de constituir la regla de
la vida” (CM, 104).
Debe buscarse el desarrollo de todas las facultades de “Martín”, porque todas fueron
afectadas por el pecado, pero no debe olvidarse la preparación espiritual, establecer una
relación salvadora con su creador.
Como sucede a veces en nuestras familias, Adán y Eva, tras haber desobedecido comien-
zan una serie de excusas en las que buscan librarse a sí mismos a costa de los demás. No
solo se rompe la armonía en la relación con Dios, también con ellos mismos.
En este punto del sermón mueva la cuna hacia la cruz y la figura de Jesús.
CONCLUSIÓN
Pida a las familias presentes que se reúnan en un mismo lugar.
En resumen, así como una semilla de mango para desarrollar el potencial que hay en ella
y convertirse en un enorme árbol necesita de agua, sustrato y nutrientes a lo largo de su
vida, para que “Martín” -y todos los hijos aquí presentes- alcance el máximo desarrollo de
lo que Dios quiere hacer en él, sus padres deben reconocer:
Pida que los padres miren a los ojos a sus hijos y repitan después de usted mientras
va sacando cada cartel, lo lee y coloca al lado del bebé.
APELACIÓN Y LLAMADO
Después de reconocer estas verdades, quiero invitarles a pasar al frente en señal de
entrega y de búsqueda de sabiduría para cuidar “la herencia que Jehová te ha dado”. Espe-
ro que pronto, cuando Jesús venga, podamos decir como Isaías “he aquí, yo y los hijos que
me dio Jehová”.
Puede obsequiarse una planta o semilla a cada familia como símbolo.
Sábado 5/ 19 de Febrero de 2022,
Tiempo de Celebrar
[Link]
5. 05 Min. Historias que Educan
FL0cc
Moisés nació durante una etapa terrible para su pueblo, Israel. Habían
vivido en Egipto durante cientos de años, se habían establecido allí
Mensaje/ cuando su antepasado, José, era el gobernador de Egipto bajo el mando
de otro faraón. En marcado contraste con el estilo de vida privilegiado
Resumen que habían disfrutado durante la época de José, los israelitas ahora
eran esclavos y sufrían bajo sus amos egipcios. El faraón había ordena-
do la matanza de todos los niños israelitas, porque estaba preocupado
por el rápido crecimiento de la población hebrea.
La familia de Moisés estaba decidida a salvarlo de la muerte. Durante
un tiempo, simplemente lo escondieron, pero pronto quedó claro que
necesitaban una solución diferente.
INTRODUCCIÓN
A. La poderosa nación egipcia estaba en crisis, había muerto el gran Faraón Amen
hotep I. Faraón tirano y opresor.
B. Generalmente los faraones reinantes eran destronados por asesinato de parte de
su sucesor que casi siempre era uno de sus hijos.
C. Regularmente un nuevo faraón legalizaba su reinado casándose con la viuda, no
importaba si era su madre o su hermana.
D. Al nacer Moisés, acababa de morir Amenhotep I, y estaba comenzando a reinar
Tutmosis I. Esto fue aproximadamente en el año 1525 a.C.
E. Tutmosis I, continuó con la tiranía y opresión hacia el pueblo hebreo (Éxodo 16:22).
a) Orden a las parteras: “Al nacer, fíjense en el sexo, si es varón, matadlo”.
b) Orden a su pueblo: “Echad al río a todo niño que naciere a los hebreos”.
c) ¡Que triste y difícil fue para Moisés y sus padres vivir en una sociedad sin
libertad, llena de opresión y amenazas!
d) Veamos con más detenimiento la interesante historia de Moisés, el niño que
fue educado por Dios y para Dios.
C. Jocabed aceptó con mucho gusto la tarea de educar a su hijo, esta era una
oportunidad de oro, educar a su hijo para Dios en la escuela adventista de la época:
su hogar.
1. E.G. White dice: “Con profunda gratitud Jocabed emprendió su tarea… aprovechó
fielmente la oportunidad de educar a su hijo para Dios” (P.P pág. 249)
2. Hatshepsut estaba tranquila pensando que ya tenía en Moisés a su futuro hijo y
Faraón de Egipto.
3. Hatshepsut cometió dos graves errores en cuanto a Moisés:
•Escoger a alguien que ya Dios había escogido para ser dirigente de su pueblo.
• Ponerlo a que se educara en la escuela cristiana de aquellos tiempos.
4. Gracias a que Amram y Jocabed comprendía el valor de la educación verdadera,
Dios pudo cumplir su plan para con Moisés.
• Amram y Jocabed pudieron haber dicho: ¡Que bueno que nuestro hijo sea educado
con los grandes sacerdotes egipcios y en los suntuosos templos!, no todos los niños
egipcios tienen esta oportunidad y menos los niños hebreos.
• También pudieron haber pensado en todas las comodidades y privilegios que ellos
como padres hubieran podido haber tenido, siendo su hijo un gran dirigente de Egip
to.
• Los padres de Moisés prefirieron para su hijo la escuela de Dios que había estable
cido para su pueblo: Un lugar seguro para crecer, aprender a vivir y servir, bajo una
intencionada influencia espiritual.
“Y TE LO PAGARÉ”
A. La princesa sabía que la crianza y educación de un niño implicaba una gran res
ponsabilidad y por eso estuvo dispuesta a invertir en ello.
B. Si Moisés iba a ser el futuro dirigente del pueblo de Dios, debía ser educado de
acuerdo al plan educativo del cielo.
C. Probablemente tengamos “grandes” opciones en el mundo para “educar” a nues
tros hijos:
a) Escuelas bilingües y trilingües
b) Escuelas con maestros de gran educación en la sabiduría del mundo.
c) Escuelas con todas las comodidades deseadas, instalaciones de lujo, etc.
d) Sin embargo, estas no son las escuelas que Dios ha elegido para la educación de
sus hijos.
“Y LA MUJER TOMÓ AL NIÑO Y LO CRIÓ” (EDUCÓ)
A. La educación impartida por los padres no tiene comparación.
a) Moisés fue educado por su madre hasta los 12 años.
b) Los años que Moisés pasó en la escuela cristiana de su época, fueron sufi
cientes para no apartarse de su Dios, aunque tuvo que asistir a otras escuelas
del antiguo Egipto.
1. Escuelas con falsas enseñanzas acerca de Dios y el universo.
2. Escuelas donde todo era idolatría y negación del Dios verdadero.
3. Pero Moisés había sido educado en el camino de Jehová su Dios y no podía apar
tarse de él
B. Los padres que comprenden la gran responsabilidad que tienen para con sus
hijos, son de gran bendición, tanto para sus hijos como para la obra de Dios.
Sin embargo, existen en el mundo cuatro clases de padres:
a) Padres desinteresados e indiferentes: No se interesan por sus hijos ni, en el
hogar ni en la escuela
b) Padres hiperexigentes: “Mamá, me saque 9 en español” le contestan
conseveridad la madre “Tú hubieras sacado un 10”. Y si saca un 10: “¡Huy!
¿y eso qué?, cualquiera lo saca”. Estos padres nunca están satisfechos… en
ocasiones se proyectan sus propias aspiraciones como metas para sus hijos.
c) Padres sobreprotectores: Se anticipan a las necesidades del niño, impiden
el desarrollo natural del hijo al rodearlo de una burbuja falsa de seguridad
que termina conduciendo a la frustración y el desengaño.
d) Padres equilibrados: Como Amram y Jocabed, padres de Moisés. Estos
padres apoyan tanto al maestro como al niño, comprenden su respon
sabilidad como verdaderos padres, educan a sus hijos junto con los maestros
tanto para esta vida, como para la venidera.
e) ¿Qué clase de padre es usted? En esta Iglesia damos gracias a todos los
padres que comprenden su deber para con Dios y sus hijos.
CONCLUSIÓN
Los padres de Moisés fueron verdaderos padres, obedientes y temerosos de Dios.
a) Educaron a sus hijos en el camino del Señor.
b) Rechazaron las aulas y la sabiduría de los maestros de Egipto. Prefirieron las hu
mildes escuelas de Jehová.
Moisés llegó a ser el gran dirigente y legislador de Israel, gracias a la educación que recibió
en los primeros años de su vida.
Moisés está hoy en el reino de los cielos, habiendo traspasado los umbrales de la muerte,
gracias a que recibió una educación fundamentada en los principios divinos.
Reproducir “Fieles”
[Link]
DuLw2I66cE
5. 10 Min. Renovación de Compromiso Mientras el himno se reproduce invitar a los
de Servicio docentes a renovar su compromiso pasando
al frente. Una vez concluido el himno, invitar
al pastor consejero y al director de la es-
cuela a tener una oración de consagración
por el equipo docente.
INTRODUCCIÓN
“La enseñanza es una profesión muy noble que moldea el carácter, el calibre y el futuro de
un individuo”. Un maestro nunca sabe a dónde lo llevará su influencia. Qué tan poderoso
puede ser su ejemplo.
Si un docente, no importando para que sistema labore, deja huellas en sus estudiantes,
cuán grande es aún la responsabilidad que tenemos los docentes adventistas al modelar
el carácter de Cristo. Es un hermoso privilegio que el Señor a concedido a sus docentes al
educar la niñez y juventud de la iglesia.
Es por esto, que los maestros son considerados el agente de cambio más importante en el
Sistema Educativo Adventista. En gran medida, de los maestros depende el éxito o el fraca-
so de la educación en cada escuela adventista de nuestra organización.
Así es, más allá de los programas y eventos que la escuela implementa, los docen-
tes guían, dirigen y motivan a los niños, adolescentes y jóvenes hacia sus metas. A través
de su intervención docente se forman los nuevos disicípulos de Cristo.
Es por esto, que me complace servir como maestro y ayudar a formar mentes jóvenes.
Estoy convencido que la docencia más que una profesión, es un ministerio.
Nuestra pasión como docentes debe emanar desde lo más profundo de nuestro corazón,
debe ser una clara evidencia de nuestro compromiso con el Señor.
La Sierva del Señor, Elena de White señaló en su libro ”La Educación Cristiana”, que la en-
señanza es “el campo misional más importante del mundo”. Sin duda, la docencia es una
profesión honorable y vital y me siento feliz de servir a Dios como maestro.
Enseñar a veces trae desafíos, desánimo y decepciones. No promete un salario alto u otros
beneficios para hacer nuestras vidas cómodas en este mundo. Aún así, como maestros, es-
tamos respondiendo a un llamado noble y dando forma a las vidas de innumerables niños
para desarrollar su carácter e iluminar sus vidas futuras.
Aunque enseñar es un reto, si seguimos los pasos de Jesús podemos tener éxito en nues-
tro ministerio. Hoy, en el marco del día de la educación adventista, es el momento perfecto
para renovar nuestro compromiso con el Señor. Te invito, a que nuevamente te coloques
bajo la dirección del divino maestro y le digas: “Aquí estoy Señor, te entrego mi vida, mi
familia y mi profesión. Úsame para el engrandecimiento de tu reino”.
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